Carina Szpilka, presidenta de Adigital, hace balance de los resultados del proceso de transformación digital acelerada al que nos ha obligado la actual crisis sanitaria en su última tribuna, publicada en El Español.
En el artículo, la presidenta de Adigital subraya el potencial consumado de la digitalización para ayudarnos a salir de esta crisis, señalando el papel fundamental que han jugado en estos días el teletrabajo o la educación online. Sin embargo, también se detiene a hacer balance sobre la experiencia de la sociedad española con estas prácticas hasta la fecha, advirtiendo de que esta digitalización forzada ha manifestado la falta de acceso a la tecnología que las posibilita, así como la ausencia de capacidades digitales básicas en una gran parte de nuestra población.
«En nuestro país, el 57% de las compañías tiene un bajo nivel de intensidad digital y, aunque el 78% de las empresas medianas considera ‘muy relevante’ la digitalización, casi no invierte en ello. Solo el 14% de las pequeñas y medianas empresas tenía antes de esta crisis un plan de digitalización«, señala Carina Szpilka, para quien no se trata tan solo de una cuestión de tecnología o infraestructuras, sino también de una cuestión de cultura interna que está por construir y responsabilidad compartida entre administraciones públicas, empresas y ciudadanos.
En cuanto a la brecha digital en las aulas, la presidenta de Adigital señala que «menos del 50% de los estudiantes de secundaria utiliza un ordenador con fines educativos en España, el 40% no pasa de nociones básicas y uno de cada seis no tiene ninguna competencia digital». De ello alertaba Adigital, a principios de año, en la presentación del informe España Nación Digital. Para Carina Szpilka, el contexto de nueva normalidad hacia el que nos dirigimos, donde es más que probable que las actividades presenciales se combinen con las virtuales durante mucho tiempo (o para siempre), nos empuja a abordar estos problemas para salir de esta situación mejor capacitados que antes, puesto que «es la única manera de conseguir que nuestras nuevas generaciones estén a la altura de las de otras regiones europeas».
«Momentos críticos como este incentivan el progreso y ahora mismo, por el carácter global de esta pandemia, tenemos ante nosotros una oportunidad de transformación a escala humanidad sin parangón. Si somos capaces de aprovechar la digitalización y la innovación, saldremos de aquí en positivo y habiendo saltado un escalón«, concluye Szpilka.