La declaración conjunta de la asociación europea Digital Europe, a la que se suma Adigital, reconoce que REPowerEU (el plan de la Comisión Europea para ahorrar energía, producir energía limpia y diversificar los suministros de energía) es una gran oportunidad para ahorrar dinero en los hogares y transformar nuestras sociedades, de forma que sean más ecológicas y menos dependientes de los combustibles fósiles y de países generadores de riesgos para nuestro continente como Rusia. Pero para alcanzar estos objetivos, debemos utilizar todo el potencial que las tecnologías digitales ofrecen para mitigar la actual crisis energética y, sobre todo, para prevenir futuras crisis similares.
Nadie se librará de los efectos de la crisis energética. Los hogares europeos también se verán sometidos a una mayor presión para llegar a fin de mes y el aumento de los precios podría empujar a muchas empresas a cerrar.
En este contexto, las tecnologías digitales pueden ofrecer soluciones de eficiencia energética a medio y largo plazo que ayuden a todos los sectores y hogares a ahorrar electricidad y reducir costes.
En el documento Digital Action = Climate Action elaborado por Digital Europe y suscrito por Adigital como organización parte de esta organización europea, se ofrecen una serie de ejemplos positivos en cinco sectores clave: construcción, fabricación, energía, transporte y agricultura.
Por ejemplo, los edificios generan algo menos de la mitad de las emisiones europeas de CO2. Las tecnologías digitales, como las soluciones de inteligencia artificial y el Internet de las cosas, tienen el poder de aumentar la eficiencia energética de los edificios en un 40%.
Las energías renovables son cruciales para liberarnos de la fuerte dependencia de los combustibles fósiles, pero la cantidad de producción renovable que puede inyectarse en la red energética depende de una serie de factores. Las soluciones digitales desempeñan un papel fundamental. Una herramienta basada en inteligencia artificial desarrollada y desplegada en un parque eólico belga aumentó en un 5-6% la energía renovable inyectada en la red.
Nos preocupa que los recientes anuncios de la Comisión y los Estados miembros no mencionen este potencial. Además, el objetivo de gasto digital del 20% en el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia se ha eliminado para el gasto de RePowerEU. La experiencia demuestra que no hay mejor momento para hacer el cambio que ahora.
La tecnología verde no solo es buena para nuestro planeta, sino que también ofrece un enorme beneficio económico para las pyme, incluido un gran potencial de crecimiento transfronterizo. En 2020, el mercado mundial de la tecnología verde superó los 4 billones de euros y está previsto que alcance los 9,4 billones de euros en 2030.
No alcanzaremos nuestros objetivos climáticos ni aseguraremos nuestro futuro suministro energético sin la tecnología.